Las vitaminas para el pelo deben tomarse de forma combinada para que todos sus nutrientes realicen sus propiedades beneficiosas sobre el cabello. Es decir, debemos ingerir cada vitamina para que actúe de forma eficaz sobre el cuero cabelludo. El consumo de este combinado potencia las propiedades de cada vitamina y también los efectos individuales de cada una de ellas.
Vitamina E: Consigue mejorar la circulación del cuero cabelludo. Mejorará considerablemente la calidad del pelo. Disponible en productos como el brócoli, zanahorias, aceites vegetales, almendras, nueces, aguacate y tomates.
Vitamina B3 o niacina: Favorece el crecimiento del cabello al mejorar la circulación en el cuero cabelludo. Habrá mejores resultados cuando se mezcle con la biotina. La encontramos en las semillas, los vegetales de hoja verde, almendras y las zanahorias.
Vitamina B5 o Ácido Pantoténico: Aumenta y regula la velocidad de crecimiento del cabello. Para que el cabello crezca más rápido se debe consumir carnes, huevos, legumbres, frutos secos.
Vitamina D: Los folículos pilosos son muy sensibles a las hormonas, y tal como la vitamina D, es una vitamina que juega un papel importante en la homeostasis del calcio, la inmunorregulación, además de la diferenciación del crecimiento celular. Según estudios, esta vitamina puede tener un importante rol en el tratamiento de pérdida del cabello.
Vitamina B6 o piridoxina: Participa en diversos procesos químicos en nuestro organismo y es responsable de la formación de los glóbulos rojos que facilitan el transporte del oxígeno a través de la sangre. Si el cabello fuera una planta, la vitamina B6 sería la regadera. Se encuentra en el arroz, salvado de trigo y ajo.
Vitamina B1 o tiamina: Una de las principales. Entre sus funciones más importantes se encuentra convertir los carbohidratos en energía, esencial para que nuestro organismo funcione. Por esta misma función también se conoce a esta vitamina como la vitamina antiestrés: cuando abunda, el sistema nervioso y el cerebro funcionan a todo gas, pero cuando falta, todo se ralentiza y el día se hace muy, muy largo. Se encuentra en el pescado, los pistachos y los guisantes. Muchas veces la ausencia de brillo en el pelo se debe a la sequedad que hay en él. La vitamina B1 sirve tanto para suavizar el cabello como para aumentar el brillo, un dos en uno.
Vitamina B2: Combate la dermatitis y los eczemas. Se encuentra en alimentos como leche, yogur, queso, germen de trigo. Los signos de la carencia de esta vitamina en el pelo son picazón y descamación del cuero cabelludo.
Vitamina B12: Permite disfrutar de un pelo fuerte y sano. Además, la carencia de esta vitamina puede acarrear la aparición de canas y la caída de pelo. Para absoberla mejor es preciso aumentar el consumo de hierro y vitamina C. La encontramos en carne de ternera, mariscos, pescados y huevos.
Vitamina B9 o Ácido Fólico: Ayuda a mantener un bonito color natural del cabello. Podemos encontrarlos en alimentos como verduras, hongos, alfalfa… Vitamina BH (Biotina): Se le denomina también como la vitamina del cabello. Ayuda a promover el crecimiento del pelo y lo refuerza, así que olvídate de posibles roturas. Entre los productos con alto contenido en biotina se encuentran las almendras, avellanas y los frutos secos en general.
Vitamina C: La falta de vitamina C en el organismo puede bloquear el crecimiento del pelo. La vitamina C es necesaria para la creación del colágeno, una proteína vital para la estructura del cabello. Pero esta vitamina se encarga también de facilitar la absorción del hierro, mineral necesario para el crecimiento del pelo.